Por si no son instruidos en la materia gastronómica oriental asíatica, por allá usan mucho comer comidas bien bien frezquitas porque la comen cruda, como el sushi, sashimi, la rana y otras mil especies más. Yo hace un tiempo vi el video donde preparaban una rana que el cliente la elegía del estanque y mientras el cocinero preparaba la rana, el consumidor se comía el corazón latiendo de la rana, todo para que se le pare la tula porque, dicen, la rana tiene poderes supermágicos afrodizíacos (el primer video es este). Ahora, los simpáticos caballeros de Revista Sebo, que de seguro tienen más tiempo dedicado al arte de buscar cosas en la Interné, pusieron un video de un japonés chaladísimo que sigue la tendencia: hace que el cliente elija el pez, lo saca lo rebana lo prepara y el cliente se lo come... grande es su sorpresa al ver que el pez está ¡nadando en el estanque!. Yo no soy partidario de que los animales sufran, y si uno se lo va a comer, que sea sin dolor, pero esto, es extremo. Aunque igual no deja de sorprender que el pez siga vivo.
Comiendo corazón de rana.
Comiendo pescado vivo.
Robado de Revista Sebo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario